Modelismo, maquetas y escenografía

HERRAMIENTAS (6)

6.- Herramientas Multiuso:

Podemos considerar que son aquellas que, mediante el intercambio de diferentes piezas y velocidades de trabajo, nos permiten realizar un sin número de trabajos sobre muy diversos materiales.

Entre los trabajos más comunes en que habitualmente usamos estas herramientas se encuentra el corte, lijado, pulido, perforado y fresado de muchos tipos de materiales de uso habitual en el mundo del modelismo (madera, plástico, metales blandos, cartón, papel, escayola, etc.).

Existen, en el mercado actual, una amplia gama de fabricantes de reconocido prestigio que elaboran este tipo de herramientas (de los que todos hemos oído hablar) y otros no tan conocidos (como es el de la herramienta que luego os presentaré) pero que también funcionan muy bien y con la ventaja de su precio. De hecho, la que normalmente utilizo (la del presente reportaje) la compré, de oferta, en una gran superficie de materiales de construcción.

Lo principal en este tipo de herramientas, a parte del número de complementos disponibles, es la posibilidad de variar la velocidad de giro del taladro a voluntad. Es muy importante (y esta herramienta, en concreto, lo tiene) para poder trabajar sobre múltiples tipos de materiales. Un ejemplo básico: no se puede cortar (con la sierra circular) a la misma velocidad un trozo de madera que uno de plástico, aunque tengan el mismo espesor, ya que la velocidad de giro del corte sobre madera aplicada al plástico lo funde y deforma.

Dentro del apartado de las herramientas multiuso vamos a tratar, exclusivamente y de forma general, aquellas ligeras que funcionan con electricidad. No incluiremos las manuales que pueden parecer Multiuso, como las cuchillas de hojas intercambiables, los martillos de cabezas intercambiables u otras herramientas de este tipo ya que, si bien mirado pueden ser multiuso, tienen unas funciones muy específicas dentro de su categoría.

De las que vamos a hablar en esta entrada son aquellas que SI son realmente multiuso, y que por su ligereza y gran cantidad de complementos especializados nos permiten realizar múltiples trabajos con un menor esfuerzo y una excelente calidad.

Veamos unas imágenes relativas a este tipo de herramientas.

Conjunto de minitaladro y parte de sus accesorios más habituales.

Como podemos ver en la foto anterior, y de izquierda a derecha, vemos el minitaladro propiamente dicho (que, en este caso, lleva acoplada una pequeña sierra circular), la extensión para el cabezal giratorio del minitaladro (ideal para cuando se ha de estar trabajando mucho rato, pues es más ligero que hacerlo con el taladro en la mano constantemente) y la bandeja en la que se encuentran (normalmente muy bien organizados para tan poco espacio) todos los extras que  pueden acoplarse a esta herramienta.

Dentro de los innumerables complementos que se presentan en la bandeja de esta multi-herramienta encontramos (empezando desde la esquina inferior izquierda y siguiendo el sentido de las agujas del reloj) sierras de disco acopladas a un eje (ideales para cortar madera, cartón, papel  y plástico), botes que contienen discos de corte de recambio (para metal y piedra), discos de lija y pasta de pulir. A continuación tenemos escobillas de plástico y metal (para pulir o eliminar restos de pinturas), discos abrasivos (muy útiles para afilar cuchillas y otras herramientas) otros tipos de diferentes cabezas abrasivas y soportes para lijas cilíndricas. Por último, en la parte inferior, encontramos varios tipos de ejes para acoplar los diferentes componentes y unas cuantos tipos de fresas de tamaño fino.

En el centro de la bandeja (de arriba a abajo y de izquierda a derecha) tenemos recambios de lijas cilíndricas, brocas de diversos tamaños, algodones planos de pulir, cabezales de diferentes grosores para la sujeción de vástagos, taladros y fresas. Por último, tenemos recambios pequeños de lijas cilíndricas (encima de las cuales se ven dos de las llaves que uso para apretar el cabezal de la máquina cuando cambio el complemento a usar), recambios de discos abrasivos y un disco grande de corte para metal o piedra.

Ahora mostraremos unas imágenes de los complementos que lleva el conjunto de esta herramienta multi-función, así como de otros añadidos por mí que, si bien no son originales del conjunto, también pueden usarse con él y amplían su capacidad de trabajo.

Otros componentes de la caja del minitaladro.

Vemos, en la imagen, el resto de los componentes que trae la caja original del minitaladro. Están: la caja propiamente dicha, con el libro de instrucciones de uso de la herramienta; a su izquierda una pequeña caja de destornilladores de cabezas intercambiables (no venía de origen, la he puesto yo para pequeños ajustes); bajo los destornilladores, un soporte ajustable a un tablero o a una mesa y, a la derecha de ese soporte, el vástago que se introduce en él para crear una columna de soporte para el minitaladro, que es ajustable en altura (podemos apreciar, en su extremo derecho, el gancho que nos permitirá colgar la herramienta).

En la siguiente imagen veremos algunos complementos añadidos por mí al conjunto original. Dado el tamaño de la caja que contiene todo el conjunto de la herramienta, no hay ningún problema en poner unos cuantos botes (de los de antiguos carretes de fotografía, por ejemplo) para guardar complementos más especializados o más de vuestro gusto personal. Caben de sobra.

Complementos extras añadidos a la caja original.

Siguiendo un orden de arriba a abajo vemos unos botes que contienen, bien guardados para que no se golpeen y estropeen, unas cabezas intercambiables de sujeción de complementos, unas brocas de menos de 0'5 mm de diámetro, unas mini-fresas de precisión para metales blandos, dos piedras abrasivas para afilado de cuchillas, brocas de hasta 2 mm de diámetro y fresas de tamaño medio específicas para madera.

Dado que la explicación del uso de cada uno de los componentes de esta multi-herramienta sería demasiado arduo (y lo veremos a lo largo del tiempo en otras entradas dedicadas a la realización de proyectos concretos), os invito a que os hagáis con una de estas herramientas y la probéis. Veréis que enseguida le podéis sacar un buen rendimiento.

Un aviso: cuando no esté muy claro el comportamiento sobre un material determinado, realizad antes una prueba con una muestra sin valor. Os evitará más de un disgusto y no estropearéis vuestro proyecto.

Nos vemos en otro capítulo.